El entierro de la sardina

Es una de las tradiciones murcianas que más me llaman la atención. No sólo por ser una fiesta muy original y colorida, sino también por el día en que se celebra: el sábado que sigue al Domingo de Resurección. Sí, en efecto, nada que ver con el fin del Carnaval, que es el momento en el que el resto del país celebra esta fiesta pagana. Y, aunque he podido conocer algunas versinoes que justifican la celebración en este día, los cierto es que no tengo muy clara cuál es la razón.

De cualquier forma, se reviven las mismas cosas: fuego purificador, fin de privaciones, Semana Santa en lugar de Cuaresma, pero privaciones a fin de cuentas... Y el día, declarado de Interés Turístico Internacional el año pasado, se lo recomiendo a todo el mundo. Lo pasas fenomenal desde la mañana hasta la noche, que finaliza con el desfile. Desfile que merece un comentario especial: todo el mundo disfruta con cada una de las atracciones que aparecen en él pero, por encima de todo: la ilusión de los más peques, sólo por eso ya merecen la pena las más de 3 horas que dura este desfile lleno de fuego, luz, color y diversión. ¡Ah! y es supercurioso el reparto de juguetes de todos los estilos que hacen los sardineros ¿de dónde vendrá esta curiosa y genial idea?

En serio, si aún no lo conoces ¿a qué estás esperando?